El arte joven es un diamante conjugado en presente. Las perspectivas y miradas de los ojos que miran la sincronía moderna han dejado de ser sinónimo de utopías. El proyecto GTG, desde sus inicios en 2015, busca apoyar a jóvenes artistas cubanos en la visualización de sus obras.
A partir del espacio de la Galería Taller Gorría, idea del actor cubano Jorge Perugorría y el curador y músico Adán Perugorría, varios exponentes han llenado las paredes de un sitio que hoy respira los aires del Distrito de arte. Puertas afuera, el color inunda los callejones, penetra en las líneas de los trazos, grafitea, pernocta para quienes caminan de noche San Isidro, el barrio testigo de este movimiento cultural que tiene casi cinco años.
Septiembre ha sido archideclarado, precisamente, como mes de culto para ese arte de las nuevas manos. El equipo de Ensayo Cero, experimento Cultural – Plataforma para la crítica y promoción creativa y de creativos cubanos e internacionales, compartió este mes una cita social y cultural en GTG. La fiesta abrió con caricias al oído de Ensemble Interactivo Habana, DJ´s y no esperó para dejar sus notas al dorso en las paredes y las medias luces. Dentro de las rutas diversas hacia conceptos diferentes que promueve GTG, también ha estado el noveno mes del año con Puzzle, repasos al arte joven.
Puzzle, a modo de sincretismo artístico, es un puente entre la observación, el diálogo y la exposición en sí. El listón sube de nivel cuando la vista se acomoda al plano detalle, el coqueteo con las formas. Artistas como Joel Leiva, Carlos Vilá, Alejandra González, Rosa Cabrera, Greta Reyna y otros exponentes han transitado durante las tardes de sábados en la galería. Hijos, en su mayoría, del ISA y San Alejandro.
La muestra, inaugurada el pasado sábado 7 de septiembre en la Galería Taller Gorría, es un manual de iniciación. Puzzle es una apología a lo más novel en el perfil de la plástica. Las doce piezas que en Gorría se presentan logran solidez conceptual y una técnica que lleva en sí el esqueleto del producto visual.
La curaduría de Jorge Peré pidió retos al mayor postor, arriesgó su avidez para dejar en escena múltiple al espectador. Una combinación entre fotografía, la pintura, la instalación y la escultura. La mirada conceptual llevada al hecho. Los discursos de una nueva generación de artistas es ya un hecho en los interiores de GTG. Podría llamársele explosión, como un guiño para el galanteo con visiones diversas que comparten el salón en San Isidro entre Picota y Compostela.
El próximo sábado 28 cerrará el ciclo de Puzzle, dejará una hendija abierta para que siga entrando el matiz, ávido para todas las interpretaciones. Algunos han posteado en sus cuentas que cuentan los días, otros despiertan a las cinco de la mañana mirando el promo de estos encuentros. Mientras, los anfitriones cruzan los dedos. Tienen la experiencia de otros talleres como secuela. El calendario juega sus dados con los días que restan y en GTG, se cocinan ideas por adelantado.
Tomado de GTG (http://galeriatallergorria.com)